"SE NOS OCURRE QUE LA POSIBILIDAD DE LEER UN TEXTO ES INVENTAR ALGO EN ESE VACIO. INVENTAR, ES DECIR, SUPLEMENTAR. EL TRABAJO DE LECTURA, CUALQUIERA SEA EL DE UN POEMA, EL DE UN TRATADO, SOLO EMPIEZA AHÌ DONDE SE PRODUCE ESE VACIO QUE DESCUBRE UN SUPLEMENTO. LO OTRO ES REITERACIÒN DE HÀBITOS FAMILIARES DE RECONOCIMIENTO" Adriana Paloma

viernes, 25 de marzo de 2011

Devenir Memoria: 24 de marzo

El recuerdo del pasado puede dar lugar a peligrosos descubrimientos, y la sociedad establecida parece tener aprensión con respecto al contenido subversivo de la memoria. El recuerdo es una forma de disociación de los hechos dados, un modo de «mediación» que rompe, durante breves momentos, el poder omnipresente de los hechos dados. La memoria recuerda el terror y la esperanza que han pasado. Ambos vuelven a vivir, pero mientras en la realidad el primero regresa bajo formas siempre nuevas, la última permanece como una esperanza. Y en los sucesos personales que reaparecen en la memoria individual, los temores y las aspiraciones de la humanidad se afirman a sí mismos: lo universal en lo particular. Lo que la memoria preserva es la historia.
Marcuse



Queridas gentes, amigos y familia:
Muy rara vez comparto con ustedes comentarios sobre mis vínculos con las ex presas políticas y las actividades en las que a veces nos re-encontramos.Pero todos saben de mi militancia y mi "retiro espiritual", del 76 al 77.

Hoy fui a la marcha que culminó, en el Monumento, con la proyeccción de un film documental sobre las Madres de Plaza 25 de Mayo, es decir, las de Rosario.
Fue una película absolutamente conmovedora, en la que hablan las madres que aún viven, la mayoría son muy viejitas, algunas ya fallecieron, imagínense ustedes que muchas tenían hijos de mi edad.Es decir que todas sobrepasan los 80, menos las que tenían hijos adolescentes en el 76, esas rondan los 70 largos, con chirolas...
Cuentan del modo más sencillo, cómo vivieron la desaparición de sus hijos (algunas de ellas supieron de la muerte, no todas recuperaron los cuerpos), cuentan sus discusiones con los militares, sus búsquedas desesperadas, sus pedidos a la Iglesia, los engaños de las que fueron objeto, cómo las humillaban en todo lugar al que iban a pedir ayuda. Curiosamente esas madres no eran militantes, la mayoría eran amas de casa, pero el amor hacia sus hijos las llevó a una lucha sin cuartel, y a contenerlos y apoyarlos cuando estaban vivos, compartiendo sus penurias y sus sueños, sosteniendo lo que ellos amaban.
Me conmovió muchísimo, no necesito decir que lloré de principio a fin, ya me conocen.Pasaron también las fotografías (rostros, tipo carnet) de los muertos y desaparecidos de Rosario y zona de influencia, con las edades que tenían al momento de su muerte o desaparición.Sólo unos pocos superaban los 30 años.La mayoría eran muy jóvenes...y había adolescentes, muchos...(eran de la UES, o de la Fede).Algunos eran estudiantes universitarios y graduados, otros secundarios, otros laburantes y gremialistas. Las cosas que cuentan esas madres de cómo pensaban sus hijos y de la vida de sacrificio que hacían, me fascinó, sobre todo porque está dicho por ellas, de modo orgulloso, todavía con los ojos inundados de amor...y de pena.

Como Uds. saben, esas mamás sufrieron amenazas y persecusiones de todo tipo, una de ellas cuenta cómo le volaron la casa en mil pedazos, luego de un allanamiento en el que los dejaron encerrados en el baño y lograron escapar por milagro antes de la explosión.No se andaban con chiquitas.
A una anciana que estuvo en cana conmigo le volaron la casa porque sus inquilinos supuestamente eran Montoneros (un matrimonio muy joven con dos bebés, de quienes nunca más supo nada) y se la llevaron también a ella.Murió en prisión porque no tenía a nadie.
Todas cuentan que en los operativos del ejército y la policía les robaban todo, dejaban las casas peladas.Me acuerdo de eso, porque cuando yo estaba en la ochava de Dorrego y San Lorenzo, caían con toda clase de cosas (heladeras, televisores, juegos de muebles enteros, ropa de cama , vajilla, etc., incluso libros....)y las subían a un depósito que estaba en un entrepiso, visible sobre nuestras cabezas, y de allí las iban bajando de a poco, supongo que las venderían o se las repartirían entre ellos.A mí me robaron todo también.Cuando salí de la cárcel no tenía nada.
Estas cosas no pueden olvidarse, son muy fuertes.Esas Madres hicieron de la Memoria su modo de vida y de lucha.Mujeres comunes, algunas sin siquiera haber hecho el secundario, todas unidas, así lo manifestaron en el film "sin distinción de religiones, ni creencias, ni partidos políticos,ni clases sociales"...yo me quedé pensando mucho en eso.Creo que justamente eso querían sus hijos, un mundo, como imaginaba y decía Lennon, hijo de esa época, donde todos pudiéramos ser iguales, compartiendo todo y viviendo en paz...Una bella Utopía que no se realizó ni se realizará, al menos ya pinta que no...¿verdad?...
Bueno, como diría Ernst Bloch, "el principio esperanza quizás dependa de nosotros..." Los dejo ya, aprovechando la ocasión para expresar el infinito agradecimiento a Lucy y
Beto, quienes salvaron la vida de mis hijas, jugándose la suya propia.
Abrazos a todos.
M.
P.D.Hubo miles de adhesiones de instituciones educativas, barriales, gremiales, org. no gubernamentales, etc., etc.Muchas más que años anteriores, lo cual es una buena señal.

Gentileza: Marìa Vitullo


Gentileza: http://epistemologia2009paloma.blogspot.com/

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